¿Cómo probar una app en solo 4 horas?

Quiero contarte lo que hicimos esta mañana en el último taller de Nahual del 2018 donde pudimos ver cómo probar una app en solo 4 horas. Una startup llamada Clinkky nos facilitó acceso a su app (Android nativa) para que la probáramos. Con esto nosotros perseguíamos dos objetivos:

• darles feedback a los amigos de Clinkky, reportar bugs, identificar riesgos, etc.,
• y por otro lado, tener una práctica de testing para los chicos de Nahual que están aprendiendo y generando herramientas para conseguir su primer trabajo en informática (todo esto lo contamos en la meetup de cierre de fin de año de Nahual). 

El resultado creo que fue maravilloso. Yo al menos quedé muy satisfecho con lo logrado, y los “clientes” (o sea, los muchachos de la startup) ofrecieron palabras de agradecimiento y dieron buen feedback de lo logrado esta mañana. 

Por cierto, ¡muy agradecidos también con Enlace Co-work que nos prestó sus instalaciones! 

¿Cómo nos organizamos?

Teníamos solo 4 horas, así que nos organizamos así:

• La invitación era a las 9am. Nos tomamos la primera media hora para el warmup, llegamos, compartimos unos mates y bizcochos, nos saludamos y nos pusimos al día.
• Media hora para la presentación de los clientes. Nos hicieron el pitch de su idea, nos contaron la historia de cómo llegaron a la propuesta de valor que tienen, cómo están organizados y qué planes de futuro tienen. 

• A las 10am arrancamos con el testing. Nos separamos en 4 grupos, y nos propusimos hacer una sesión de discovery de máximo 20 minutos para explorar la aplicación y conocerla, obteniendo así una primera impresión de lo que había para probar. 
• Luego de ese primer “sprint” hicimos una puesta a punto, algo así como un review del trabajo hecho y una breve retro de cómo trabajamos, para así planificar el siguiente sprint. Ya acá compartimos algunas observaciones iniciales y se resolvieron dudas con los clientes. Decidimos cuál iba a ser la misión del siguiente sprint, donde todos los grupos seguiríamos probando por separado pero con un foco bien claro, que era registrarse en la aplicación. 

• 15 minutos después hicimos otra puesta en común. Ahí ya comentamos en detalle todos los incidentes encontrados y mientras los comentábamos los anotamos en un papelógrafo. En el siguiente sprint nos dividimos los incidentes entre los distintos grupos para investigarlos y reportarlos en Mantis. 

• Hicimos una pausa para comer y tomar algo más, siguiendo con la parte social también ?
• Al volver nos quedaba solo una hora así que nos pusimos misiones separadas por grupo, como para poder cubrir las fucnionalidades más críticas. Cada grupo tenía algo distinto para probar esta vez. 
• Por último, hicimos un último sprint donde refocalizamos las misiones en base a algunos blockers encontrados. 
• Para cerrar hicimos una puesta a punto, hicimos un resumen de los riesgos, problemas y sugerencias. También hicimos un cierre contando cómo nos sentimos haciendo las pruebas, destacando los aspectos positivos y lo que aprendimos al haber trabajdo con ese compañero que nos tocó. 

Aspectos clave

Creo que algunas cosas que hicieron que todo funcione mejor fueron estas:

• Los clientes estaban muy interesados en las pruebas, estuvieron atentos y a disposición todo el tiempo. 
• Nos organizamos con el objetivo de aportar el mayor valor. Esto quedó claro desde el inicio y todos acordaron en la forma de trabajo, pero incluso proponiendo mejoras que se incorporaron. 
• Comenzamos a dar valor al cliente desde el inicio, desde que estaban presentando el producto se hicieron preguntas súper interesantes, típicas de un tester 🙂 Además, no se esperó al final para armar un reporte, sino que desde el primer sprint de pruebas se fueron informando de los errores encontrados. 
• Pusimos foco en encontrar defectos y sugerencias, primero se conversaban con el cliente y luego se registraban en Mantis de forma breve, como para que quede una referencia, más allá que no quede con una documentación extensiva. 
• El compromiso y ganas abundaba, tanto por la gente que tenía ganas de aprender como por parte de los colaboradores que queríamos aportar nuestro granito de arena. 

Estoy convencido que este es el camino que vamos a seguir en Nahual el año que viene y que va a hacer la diferencia a todo aquel que se acerque. ¡Prestá atención que volvemos en febrero con más ganas!