Este post está motivado por el curso de introducción al testing que preparamos con Gabriela para Abstracta Academy. En el siglo pasado, para poder trabajar, uno tenía necesariamente que ir al lugar de trabajo, ya sea el taller, la fábrica, el campo, etc. Hoy en día, los trabajos modernos y especialmente los relacionados con la tecnología y la construcción de software, no tienen esta característica. Uno puede trabajar desde casa.
Si cuentas con una computadora con Internet, ya tienes la posibilidad de trabajar normalmente. Muchas empresas ofrecen la posibilidad de trabajar desde casa algunos días, y hay casos en los que contratan personas a distancia, en otros países, con lo cual estas personas podrían estar trabajando desde la casa o un café, sin afectar los resultados.
Esto para muchos es un sueño, trabajar desde la casa, no tener que ir a trabajar, absoluta flexibilidad. Aquí lo que te planteo es una serie de desafíos que debes tener en cuenta para que esos sueños no se transformen en pesadillas, y que si tienes la posibilidad de trabajar desde tu casa lo puedas disfrutar y realizar con éxito.
Mantener una buena comunicación
Trabajar en informática no implica solo trabajar con una computadora (como mucha gente piensa). La clave para obtener buenos resultados es cómo uno se desempeña trabajando con otras personas. Para esto, es muy importante que mantengas una buena comunicación con el resto del equipo.
De acuerdo a un estudio realizado por el antropólogo Albert Mehrabian, las palabras representan solo un 7% de la comunicación, el tono de voz un 38% y el lenguaje corporal un 55%. Esto significa que al trabajar de manera remota nos perdemos más de la mitad del mensaje, lo cual implique quizá uno de los principales desafíos.
Por lo tanto, debes ser muy cuidadoso al seleccionar una herramienta para comunicarte con tus colegas, y aprender a usarlas de la mejor manera. Las videoconferencias permiten una experiencia de comunicación mucho más rica que las llamadas por teléfono o mails. Al trabajar de casa debes encontrar un balance adecuado entre los distintos medios de comunicación de forma de establecer y mantener una buena comunicación con el resto de los integrantes del equipo de trabajo.
Evitar nuevas distracciones
Cuando estás en tu casa, si bien no tienes las distracciones típicas de la oficina, se te pueden presentar otras distracciones nuevas. Por ejemplo, si tienes hijos, padres, abuelos u otros familiares en la casa. Si tienes mascotas o simplemente suena el timbre, viene un vecino, la sanitaria, suena el teléfono, etc. Procura hacerte un espacio para trabajar en el que te sientas a gusto y puedas disminuir las distracciones o restringirlas dentro del horario de trabajo.
Establecer y cumplir con un horario
Cumplir con el horario de trabajo no solo implica estar disponible y productivos en el horario establecido sino ser capaces de cortar con el trabajo una vez que este finaliza. Muchas veces estas en el medio de algo que no quieres dejar por la mitad y continuas. Ten en cuenta que esto puede afectar luego tu rendimiento y tu entusiasmo para trabajar si permaneces muchas horas y sacrificas momentos personales durante largos períodos de tiempo. Para evitar estas situaciones, procura organizarte bien y planear de antemano la jornada de trabajo, fijándote objetivos a cumplir en el día.
Es importante también que tomes descansos periódicos, que te permitan despejarte y así mantener tu nivel de productividad. Establece pausas a intervalos regulares, puedes estirarte, tomar un café, dar una vuelta por el resto de la casa, cruzar una charla con algún familiar o jugar unos momentos con tu mascota. Estas pequeñas pausas te ayudarán a mantenerte productivo. Te recomendamos que leas sobre la técnica pomodoro para conocer más sobre esto.
Mantener el equilibrio entre la vida personal y laboral
Trabajando desde casa, la línea entre el ambiente personal y laboral se vuelve muy delgada y borrosa. Es importante que mantengas un adecuado equilibrio entre ambos. Respeta los espacios y horarios de cada uno de forma de mantener un adecuado balance que te permita estar bien y aprovechar tu tiempo de la mejor manera.
Muchas personas que trabajan desde su casa tienen una habitación destinada a tener su escritorio y a ambientarlo como si fuera su oficina. Esto te plantea un quiebre psicológico, mientras estás en esa habitación te sientes trabajando, mientras estás fuera, estás en tu hogar, con otras cosas. Esto te ayudará también a evitar distracciones, por ejemplo, el resto de los integrantes de tu familia sabrán que mientras estás ahí estás trabajando, ahí no estará la tentación de la TV, no dejarás entrar a tu mascota.
Entonces, si vas a trabajar desde casa…
Cuando estés trabajando de tu casa recuerda que, además de los múltiples beneficios que tiene, existen algunos desafíos que deberás enfrentar, para los cuales necesitas cierta disciplina. ¡Conócelos y define tempranamente como atacarlos antes de que estos se conviertan en un problema!